Anillo

Anillo delantero

El anillo delantero siempre permanece en contacto con la pared interna del contenedor gracias a un mecanismo de compensación: cuanto mayor sea el desgaste del anillo, mayor será la cantidad de aluminio que puede fluir y solidificarse por debajo de él, adaptándolo al diámetro del contenedor.

Gracias a la alta presión de inyección, la aleación fluye en el espacio creado entre el pistón y el anillo frontal a través de los orificios (o canales) en la cabeza del pistón, presionando el anillo contra la pared interna del contenedor y asegurando así un excelente sellado al vacío.

El flujo continuo de la aleación permite que el anillo frontal se expanda ligeramente y se adapte continuamente al diámetro interior del contenidor, compensando cualquier ovalización y deformación.